miércoles, 7 de enero de 2009
*Concurso para la nueva Iglesia Evangélica de Alameda de Osuna (3er PREMIO)
ECONOMÍA Y MATERIALES: El proyecto se construye con 653,85€/m2 e intenta dar cabida a la mayor parte del programa requerido.
El presupuesto con el que se cuenta nos lleva a plantear el proyecto desde la sencillez de materiales, a los cuales se les saca el máximo partido. Por ello se recurre a un material que es la vez cerramiento exterior, estructura, y partición entre distintas dependencias: El Bloque de Hormigón Blanco, que colocado de distintas maneras, configura una fachada con textura y movimiento.
CALIDEZ: Una iglesia evangélica ha de ser un lugar sin duda alguna, cálido y cercano, alejado de los espacios desmesuradamente amplios e impersonales.
El proyecto toma con cuidado las alturas y las calidades de los materiales, proponiendo un Salón de Cultos con un falso techo de madera laminada que da calidez a dicho espacio, con una altura que hace que Dios se presente “más cercano”.
SIMBOLISMOS: a. ROCA: El aspecto del edificio pretende sugerir un aspecto pétreo, dando a entender la iglesia como una “roca firme”, un “refugio seguro”. b. BLANCO: El color es fundamental. Se elige el blanco como símbolo de pureza, limpieza, y hace alusión a pasajes como el de la “piedrecita blanca” de Apocalipsis 2, o a las “vestiduras de lino blanco” con las que Dios vestirá a su iglesia. c. HENDIDURA DE LA ROCA: Las ventanas se plantean como hendiduras en la roca, recordando así el pasaje en el que Moisés se refujia en la hendidura de una roca antes de ver a Dios. Así las ventanas no hacen sino sustituir dos módulos de bloque de Hormigón blanco de fachada para que de este modo estén perfectamente integradas en la modulación de las piezas. d. MADERA: La madera en el templo era símil de la condición humana, el hecho de introducir un falso techo de madera en el Salón de Cultos no es sino reflejar el acercamiento de Dios a la humanidad, haciéndose Él mismo hombre.
El presupuesto con el que se cuenta nos lleva a plantear el proyecto desde la sencillez de materiales, a los cuales se les saca el máximo partido. Por ello se recurre a un material que es la vez cerramiento exterior, estructura, y partición entre distintas dependencias: El Bloque de Hormigón Blanco, que colocado de distintas maneras, configura una fachada con textura y movimiento.
CALIDEZ: Una iglesia evangélica ha de ser un lugar sin duda alguna, cálido y cercano, alejado de los espacios desmesuradamente amplios e impersonales.
El proyecto toma con cuidado las alturas y las calidades de los materiales, proponiendo un Salón de Cultos con un falso techo de madera laminada que da calidez a dicho espacio, con una altura que hace que Dios se presente “más cercano”.
SIMBOLISMOS: a. ROCA: El aspecto del edificio pretende sugerir un aspecto pétreo, dando a entender la iglesia como una “roca firme”, un “refugio seguro”. b. BLANCO: El color es fundamental. Se elige el blanco como símbolo de pureza, limpieza, y hace alusión a pasajes como el de la “piedrecita blanca” de Apocalipsis 2, o a las “vestiduras de lino blanco” con las que Dios vestirá a su iglesia. c. HENDIDURA DE LA ROCA: Las ventanas se plantean como hendiduras en la roca, recordando así el pasaje en el que Moisés se refujia en la hendidura de una roca antes de ver a Dios. Así las ventanas no hacen sino sustituir dos módulos de bloque de Hormigón blanco de fachada para que de este modo estén perfectamente integradas en la modulación de las piezas. d. MADERA: La madera en el templo era símil de la condición humana, el hecho de introducir un falso techo de madera en el Salón de Cultos no es sino reflejar el acercamiento de Dios a la humanidad, haciéndose Él mismo hombre.
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